martes, 16 de marzo de 2010

Práctica 17: Observación y disección del hígado.

Objetivo:

El objetivo de nuestra primera práctica relacionada con el aparato digestivo ha sido observar el aspecto externo de un hígado de cerdo, muy semejante al de los seres humanos tanto en tamaño, aspecto y funciones.

Fundamento teórico:

El hígado es una glándula de 1.5 Kg de peso, de color caoba y de aspecto granuloso; es el órgano interno más grande del cuerpo y está situado en la parte derecha de la cavidad abdominal. Cada gránulo, del tamaño de una cabeza de alfiler, forma un lobulillo hepático. Los lobulillos producen el jugo hepático, que es la bilis, la cual vierte en el duodeno por medio del conducto colédoco.

Esta glándula se comporta como una auténtica fábrica química, realizando numerosas funciones, todas ellas fundamentales: regula el nivel de glucosa en la sangre, almacena glucógeno, hierro y vitaminas, procesa aminoácidos, fabrica muchas proteínas, produce y regula el colesterol sanguíneo, actúa como regulador hormonal, etc. Además, desde el punto de vista digestivo, produce la bilis que se va acumulando en la vesícula biliar.

Está dividido en dos lóbulos separados por el ligamento falciforme. Cada lóbulo está formado por un gran número de lobulillos constituidos por células epiteliales especializadas “hepatocitos” dispuestos en láminas replegadas alrededor de una vena central.

Material:

1. Hígado de cerdo

2. Cubeta de disección

3. Tijeras

4. Bisturí

5. Portaobjetos

6. Cubreobjetos

7. Microscopio


Procedimiento:

En primer lugar, colocamos el hígado de cerdo dentro de una cubeta de disección. Comenzamos observando sus características externas: su color caoba, su tacto, etc.

A continuación, localizamos los orificios de la vena porta y vena hepática. Del mismo modo, localizamos el conducto por donde se vierte la bilis. Desgraciadamente, la vesícula biliar había sido extirpada, por lo que no pudimos observarla.

Una vez observadas sus características externas y localizados dichos orificios y conducto, intentamos pesar el órgano para comprobar si su peso se correspondía con el de un ser humano. Debido a su tamaño, nos vimos obligados a dividirlo en cuatro partes, para así poderlas pesar por separado. Finalmente, sumamos las cuatro cantidades y obtuvimos el peso del hígado de cerdo (1.318 Kg), muy semejante al peso de un hígado de una persona adulta.

Nuestra intención era diseccionar un lobulillo hepático para poder observarlo al microscopio. Por desgracia, el tiempo fue un inconveniente, y no pudimos observar la muestra.

Observaciones:


· Peso de la víscera ---> 1.318 Kg.

· Color -------------------> Rojo pardo.

· Aspecto externo ----> Resbaladizo y liso.



1 comentario:

  1. Muy bien Pilar, aunque lo que observamos fue la arteria hepática, recuerda que aprendimos a distinguir una arteria de una vena.
    Por lo demás muy bien.

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