Nombre científico: Caléndula officinalis.
Se trata de una planta que se viene utilizando en la región mediterránea desde la época de los antiguos griegos, y con anterioridad ya era conocida por los hindúes y los árabes por sus cualidades terapéuticas como una hierba medicinal así como un tinte para telas , productos de alimentación y cosméticos, aunque muchos de los usos populares que se le han atribuido no se han podido demostrar científicamente.
Se trata de una planta herbácea de unos 20 a 55 cm de altura. Las flores son liguladas y amarillas, con una floración que dura prácticamente todo el año, cerrándose de noche y abriéndose a al amanecer. El olor que desprenden las flores es desagradable y su sabor es amargo.
Propiedades:
o Emenagoga (estimula la menstruación)
o Antiinflamatoria
o Antiséptica (desinfectante)
o Antiespasmódica (alivia espasmos)
o Cicatrizante
o Hipotensora (disminuye la tensión arterial)
o Sudorífica (promueve la sudoración)
· Cera de abeja (50 gr)
· Aceite (1/2)
· Caléndula (plantas secas) (1/2)
· Calefactor
· Caldero
· Tela para filtrar
· Bote pequeño
· Espátula
· Rejilla de amianto
· Dermina ( buen olor)
· Embudo
· Vaso de precipitado grande (2)
Método:
En primer lugar, vertemos 500 ml de aceite de oliva en un vaso de precipitado y lo calentamos en el calefactor SIN que hierva. Mientras calentamos el aceite, molemos un poco la planta seca. Entonces, la metemos en el vaso de precipitado hasta que pierda todo el agua, aproximadamente durante 10 minutos, mientras removemos la mezcla con regularidad.
Ahora debemos preparar un filtro para pasar la mezcla a otro vaso de precipitado. Para ello, colocamos el embudo en el otro vaso de precipitado y, sobre el embudo, ponemos un trozo de tela. Poco a poco, vamos vertiendo la mezcla sobre la tela hasta filtrarla por completo. Nuevamente, volvemos a calentar añadiendo unos 50 gr de cera de abeja a la disolución. Seguimos removiendo hasta que la cera se derrita totalmente. Entonces, añadimos 5 gotas de dermina para que nuestra pomada tenga un olor agradable. Finalmente, rellenamos los recipientes con la disolución final y la dejamos reposar hasta que solidifique. Es entonces cuando nuestra pomada casera está lista.