martes, 9 de febrero de 2010

Práctica 14: Determinación de la vitamina C.

Las vitaminas hidrosolubles son solubles en agua, por lo que de difuenden bien por la sangre y se eliminan por la orina. Suelen ser cofactores enzimáticos o bien precursores.

La Vitamina C o enantiómero L del ácido ascórbico, es un nutriente esencial para los mamíferos. La presencia de esta vitamina es requerida para un cierto número de reacciones metabólicas en todos los animales y plantas y es creada internamente por casi todos los organismos, siendo los humanos una notable excepción. En organismos vivos, la vitamina C es un antioxidante, pues protege el cuerpo contra la oxidación, y es un cofactor en varias reacciones enzimáticas vitales.

Aunque existen otros alimentos más ricos en ácido ascórbico, popularmente se considera que los cítricos son una fuente natural de vitamina C.


Objetivo:

El objetivo de está practica ha sido determinar la cantidad de vitamica C presente en diferentes disoluciones (zumo de naranja, de mandaria y de limón, zumos industriales...).

Material:

- Naranja
- Mandarina
- Limón
- Mirinda
- Minute Maid Duofrutas
- Complejo vitamínico (redoxón)
- Lugol (solución yodurada)
- Almidón de patata (indicacor)
- Tubos de ensayo
- Gradillas
- Embudo
- Pipeta
- Agua destilada
- Vaso de precipitado

Fundamento teórico:

En presencia de Lugol, el almidón cambia su color blanquecino a violeta. Por lo tanto, utilizaremos la disolución de almidón en agua destilada como solución control, en otras palabras, como indicador. Así, colocaremos dicha solución control en un tubo de ensayo y, en el resto de los tubos, una misma cantidad del líquido a estudiar y la misma cantidad de disolución de almidón.

Al igual que ocurre si la vitamina C se mantiene al aire libre, el iodo del Lugol reacciona con la vitamina C y la oxida. Después, pasa a combinarse con el almidón (dado que se trata de una macromolécula forma un coloide) y no se diluye por completo. Por lo tanto, si tenemos una muestra del líquido a estudiar con el almidón y se añade Lugol, éste reaccionara primero con la Vitamina C, oxidándola, y después, cuando se haya oxidado toda la vitamina C, pasará a combinarse con el almidón. De tal modo que, cuanto más tarde en tornarse la disolucón violeta, más vitamina C tendrá, puesto que el iodo de Lugol esta oxidándola.

Procedimiento:

En primer lugar, debemos fabricar la solución control (disolución de almidón en agua destilada). Para ello, tomamos 100ml de agua destilada y añadimos almidón hasta saturar, más o menos. A continuación, añadimos 150ml más a la disolución.

Tras esto, comprobamos como reacciona la disolución al añadirle unas gotas de Lugol. Podemos obervar rápidamente, como la disolución cambia su color blanquecino original por un color violeta.

El segundo paso, es obtener 2ml de cada líquido a estudiar (zumo de naranja, de mandarina, de limón, ect.) y colocarlos en los distintos tubos de ensayo. A continuación, añadimos 2ml de la solución control a cada tubo de ensayo.

Para comprobar la presencia de vitamina C, añadimos gotas de Lugol a cada tubo de ensayo, las necesarias para que la disolución se torne violeta. Cuando esto suceda, toda la vitamina C se habrá oxidado en presencia del iodo del Lugol y, éste pasará a combinarse con al almidón.

Conclusión:

· Mirinda (reaccionó con 1 gota de Lugol)
· Minute Maid Duofrutas (reaccionó con 1 gota de Lugol)
· Naranja (reaccionó con 1 gota de Lugol)
· Limón (reaccionó con 2 gotas de Lugol)
· Mandarina (reaccionó con 1 gota de Lugol)
· Complejo vitamínico (Redoxón) (reaccionó con 23 gotas de Lugol)


Como se observa en los resultados, el complejo vitamínico (redoxón) fue la muestra que más vitamina C contenía, debido a que tras verter 23 gotas de Lugol en la muestra, fue cuando se tornó violeta.

Teniendo en cuenta que, popularmente se considera que los cítricos son una fuente natural de vitamina, resulta algo extraño que en la disolución de zumo de naranja, el almidón haya reaccionado con tal sólo una gota de Lugol. La única respuesta lógica es que la naranja que utilizamos para obtener el zumo estuviese oxidada, y por tanto, hubiese perdido vitamina C.


martes, 2 de febrero de 2010

Práctica 13: Determinación del grupo sanguíneo y estudio de un frotis de sangre.

Objetivo:


El objetivo de esta práctica ha sido conocer de una forma muy sencilla nuestro grupo sanguíneo y observar, tras realizar un frotis de sangre, las células presentes en la sangre.

Material:

- Microscopio
- Portaobjetos
- Lancetas estériles
- Sueros sanguíneos anti A, anti B y anti RH
- Palillos
- Algodón
- Alcohol
- Solución de Giemsa
- Agua destilada

Fundamento teórico:

Los glóbulos rojos contienen dos tipos diferentes de antígenos capaces de ser aglutinados por sus correspondientes aglutininas. Tales antígenos se han denominado, por esta razón, aglutinógeno A y aglutinógenos B. Según la persona, sus glóbulos rojos pueden contener uno solo de dichos aglutinógenos, los dos reunidos o ninguno.

En el suero sanguíneo existen también dos anticuerpos aglutinantes llamados aglutinina α y aglutinina β. Del mismo modo, se pueden poseer una de las dos, las dos juntas o ninguna.

La aglutinina α produce de la aglutinación de los hematíes con aglutinógeno A (fenómeno observable por la aparición de grumos oscuros en la sangre), mientras que la β produce la aglutinación de los hematíes que poseen el aglutinógeno B. Fácilmente se comprende que en una misma persona no puedan coexistir a la vez los glóbulos rojos con aglutinógeno A y suero con aglutinina α, como tampoco B y β, pues de lo contrario se aglutinarían los glóbulos rojos.

Procedimiento:


1. En primer lugar, para obtener una muestra de sangre hacemos una punción en la yema de un dedo con la lanceta estéril de un solo uso. Apretamos la yema del dedo para que gotee la sangre y colocamos tres gotas bien separadas en un portaobjetos limpio.


2. En segundo lugar, colocamos sobre la gota de la izquierda una gota de suero anti A, en la del centro una gota de suero anti B y en la de la derecha una gota de suero anti RH.


3. Por último, mezclamos bien con distintos palillos la gota de sangre con la de su suero. Según se produzca aglutinación en una gota u otra, tendremos sangre de tipo A, B, AB, O, RH+ O RH-.


Conclusión:

En la siguiente imagen podemos observar diferentes muestras de sangre de diferentes alumnos de clase.


En el ejemplo señalado, podemos observar como el sujeto es del grupo O+, debido a que la aglutinación solo se produjo en la gota de sangre con suero anti RH. No se provoco la creación de grumos oscuros ni en la gota de sangre con suero anti A, ni en la gota de sangre con suero anti B.

Estudio de un frotis de sangre:

Un frotis de sangre consiste en realizar una extensión de sangre sobre un portaobjetos, colorearla y examinarla al microscopio.

En la preparación que observamos identificamos los distintos glóbulos sanguíneos. Para ello realizamos una observación utilizando los distintos objetivos (de mayor a menor aumento).

Procedimiento:

A la vez que colocamos tres gotas de sangre en un portaobjetos para la observación del grupo sanguíneo del sujeto, colocamos una gota de sangre más en el extremo de otro portaobjetos para realizar el frotis y así poder observar las células existentes.


Para éste, apoyamos el extremo de otro portaobjetos sobre la gota hasta que esta se extienda por capilaridad. Ha de ser extendida de una pasada rápida para que resulte una sola capa de células. El ángulo de los portaobjetos no debe ser mayor de 45°, pues cuanto mayor sea y más lenta se haga la extensión, la capa resultará más gruesa. El frotis debe secarse rápidamente al aire para evitar la formación de pequeños coágulos, lo que se facilita moviendo el portaobjetos.


Una vez la extensión de sangre esté seca, la teñimos con la solución de Giemsa (la solución ha de cubrir toda la muestra). Tras varios minutos, añadimos sobre la muestra dos o tres gotas de agua destilada y volvemos a esperar dos minutos. Pasado el tiempo de espera, lavamos la muestra con agua destilada, con precaución para evitar que el agua arrastre también las células y no solo el exceso de colorante.

Conclusión:

El frotis no estaba bien realizado, por lo que no pudimos apreciar bien las células existentes. Sin embargo, si pudimos observar muchos leucocitos, posiblemente eosinófilos, ya que el sujeto padecía procesos alérgicos.



Como no se podía observar mucho más, tomamos una muestra ya preparada. En ésta, pudimos apreciar una gran cantidad de linfocitos pequeños, agentes que intervienen en la llamada respuesta inmunológica. También pudimos observar neutrófilos y basófilos, aunque, las células en mayor cantidad eran los eritrocitos (glóbulos rojos), con forma de disco bicóncavo y carentes de núcleo.